La etapa final de restauración de los murales del pintor José Clemente Orozco que están en el Paraninfo de la Universidad de Guadalajara llevan un avance del 30%.
El trabajo final comprende la aplicación de color en los resanes en las grietas y fisuras que se hicieron tras el temblor del año pasado que afecto los murales.
En la restauración trabajan dos restauradores y ocho técnicos todos certificados por el Centro Nacional de Conservación y Registro del Patrimonio Artístico Mueble (CENCROPAM) del Instituto Nacional de Bellas Artes.
Alberto González Veyra, coordinador de la restauración, detalló que se aplica la técnica de la acuarela porque es un material totalmente reversible y que se aplica por transparencias y es fácil eliminar cualquier error e iniciar de nuevo.
El especialista mencionó que en los trabajos se utiliza el sistema rigatino que consiste en pintar pequeñas líneas delgadas que van rellenando el espacio y que son visibles a un metro de distancia, pero a una distancia mayor se pierden por lo que no se nota el trabajo de intervención.
