Fue uno de los primeros sicarios en subir a redes sociales fotos de las labores que le encomendaba Servando Gómez ‘La Tuta’, cabeza del cártel de ‘Los Caballeros Templarios’; Antonio Olalde, ‘Broly Banderas’, nunca escondió su rostro y se presentaba como un hombre osado y valiente.
Su nombre de guerra lo tomó de dos de sus aficiones; la serie animada de ‘Dragon Ball Z’ y del actor español Antonio Banderas. Su fama creció por todo el ciberespacio, sus páginas de Facebook y Twitter tenían miles de seguidores y el Broly, en alusión al villano sayayin del anime japonés, nunca los decepcionó al subir a casi diario fotos y post de sus actividades criminales.
El sicario confesó que desde los veinte años ingresó al cártel y a los pocos días se había enfrentado a balazos con autoridades; su sueldo era de 20 mil pesos mensuales.
Afirmó que decidió entrar al negocio por la fama y el dinero, pero dejó en claro que nunca mató a nadie a sangre fría, sólo asesinó en los enfrentamientos contra ‘La Familia Michoacana’ y la Policía Federal.
Banderas se casó con una joven, pero no ocultó que gracias a su popularidad varias mujeres lo buscaron para sostener un romance con él.
Se dijo que durante una balacera contra autodefensas, Olalde fue herido de muerte y por las redes sociales comenzaron a circular fotos de su cadáver, pero esta versión jamás se comprobó.
Al pasar el tiempo la cuenta del criminal dejó de actualizarse y surgió el rumor que se retiró de la organización criminal para evitar ser detenido por autoridades o asesinado por sus rivales.
En otros medios se asegura que Antonio se pasea impunemente por las calles del pueblo de Pajacuarán.
